Llevamos ya tres meses perdidos en las montañas de Lost Coast trabajando muy duro cultivando plantas medicinales para la industria local. Lo que es más duro es pensar que llevamos trece meses en California para conseguir completar nuestra nave Ajolá y continuar nuestro viaje alrededor del mundo. Es una parada que se está haciendo muy larga pero vinimos aquí con una misión, la de completar el proyecto de nuestra nave Ajolá y ahorrar algo de lana para seguir hacia el sur de América pasando por Cuba, claro. Los últimos días he estado por allá con mis recuerdos y mis sueños. Como uno navega por sus sueños bastante bien he de deciros que he disfrutado soñando éstos días y noches. Empezaré por contaros algunos de mis recuerdos durante mi estancia en Cuba durante tres meses en el año 1992 y luego pasaré por contaros mis sueños y deseos para éste nuevo viaje a la isla….Cuba es el lugar perfecto para que se hagan realidad o lo más excitante, descubrir nuevos sueños y mágicas experiencias.
Mireia, mi comay cubana
Manuela, la nieta de Don Félix.
Marilyn, alegría y mucha salsa.
Aidé, la nieta de mi abuela Marta
El taíno Chacón, pariente cubano
Quien maneja éstos patines por La Habana
Arte local en la Plaza de la Catedral
Amigas de Pinar del Río
Doña Marta y su marido Renato
Mi abuela Marta, su nieta Clara y mi bicimoto chinogermanocubana.
Tod*s a la escuela
Busco profesora de salsa para tres meses
Mostrando mis grabaciones a los cultivadores de tabaco
Los mogotes de Viñales con mi colorida guía al caballo.
La abuela Akuátika
Asando judías con los vecinos.
Juan con su hija Manuela.
Juan, una roca.
Manuela.
Félix con sus espléndidos guanajos.
Félix con su recíen cosechado café.
Don Félix, un alma libre.
Todo se comparte.
Nuestra yegua para bajar al pueblo y sobre todo para subir de noche después de unas cuantas botellas de ron.
Fiestuky en la granja.
Mi familia en Viñales. Los Akuátikos.
Panorámica del valle de Viñales desde casa de Félix y su familia.
Bohío en el valle.
Amanda.
Manule, el taxista y su familia
Éstas son algunas fotografías de nuestros recuerdos durante tres felicisísimos meses en Cuba en el año 1992. Me despedí llorando de ésta maravillosa isla y creo que mis lágrimas fluirán con gran felicidad si conseguimos llegar a ella después de vivir la pesadilla americana…..y éstos son nuestros sueños…..continuará…es un borrador.
